A pesar de contar con el embalaje adecuado, la mercancía no está exenta de sufrir algún impacto o estrés durante el transporte que comprometa su integridad.
Por esta razón, se emplean dispositivos que nos van a ayudar a controlar en todo momento el estado de la carga. Así, en caso de un posible siniestro, podremos pedir responsabilidades.
Dispositivos de control para el seguimiento de la carga: tipos según su función
En general, los elementos de control activo para el seguimiento de la carga brindan información en tiempo real sobre la ubicación y estado de los productos en tránsito.
Son dispositivos de fácil funcionamiento. Con ellos podremos saber si nuestra mercancía ha viajado de forma segura, además de ayudarnos a optimizar nuestros procesos logísticos y a generar ahorros.
Estas herramientas resultan muy útiles en el caso de productos frágiles o sensibles, por lo que son de aplicación en la protección para componentes de automoción, equipos de laboratorio, aparatos electrónicos, productos de cristal y obras de arte.
Dependiendo de su función, podemos distinguir entre:
- Detectores de impacto y verticalidad (mecánicos y electrónicos).
- Detectores de humedad.
- Detectores de temperatura.
Detectores de impacto mecánicos
Los detectores de impacto y verticalidad de uso más habitual son dispositivos mecánicos, tipo sticker (con adhesivo) que se colocan en el exterior del embalaje.
Estos indicadores miden aceleraciones en un solo eje (una dirección y dos sentidos) y para su tarado de funcionamiento se basan en la constante gravitatoria en forma de fuerza g. Cuando se ha sobrepasado la aceleración máxima tarada, se activan cambiando de color (rojo). De esta manera podemos saber si nuestra mercancía ha recibido algún impacto o se ha inclinado durante el trayecto.
De igual importancia son los detectores bidimensionales. Estos modelos captan los impactos en dos direcciones. Igualmente pueden mostrar la dirección, el sentido y el módulo de la fuerza máxima a la que fue sometida la carga.
Para saber qué tipo de detector necesita nuestra mercancía, debemos tener en cuenta el volumen y el peso de la misma.
Detectores de impacto electrónicos
Cuando por sus características es preciso un mayor control, existen detectores de tipo electrónico o “loggers”, que permiten un seguimiento más exhaustivo de todo el proceso de expedición y transporte. De este modo podremos conocer el lugar, la fecha / hora y la magnitud de cualquier impacto o agente nocivo que puede haber dañado la mercancía.
Detectores de humedad
Por otra parte, los detectores de humedad y de temperatura sirven para controlar las condiciones medioambientales a las que ha estado expuesta nuestra mercancía.
De hecho, las tarjetas indicadoras de humedad constituyen una prueba visual del grado de humedad del ambiente. También permiten saber si las sales desecantes han alcanzado su límite de capacidad de absorción.
Detectores de temperatura
En cambio, los detectores de temperatura nos dirán si la carga ha estado expuesta por encima o por debajo de una temperatura determinada. Así, nos alertan de una posible rotura de la cadena de frío, por ejemplo.
Monitorizar y controlar la mercancía durante los envíos garantiza la calidad de nuestros productos y procesos.
Consúltanos y estudiaremos el método más adecuado a tu caso.