La forma en que las empresas distribuyen sus productos está en constante evolución. Aspectos tan dispares como la legislación, la rentabilidad, la innovación o las preferencias del consumidor condicionan los cambios a los que se someten los procesos logísticos para cumplir con los requisitos de calidad, seguridad y eficiencia.
En lo que se refiere al diseño de envases y embalajes, todo indica que el packaging del año 2023 seguirá transitando por la senda de la sostenibilidad que inició en los últimos años, aunque este bajo el imperativo de normativa que implicará nuevas obligaciones fiscales.
Como fabricantes de soluciones de embalaje, repasamos las principales novedades que traerá este año 2023 al sector del packaging.
Impuesto al plástico
La Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular que se aprobó el pasado año pretende mejorar la gestión de los residuos que se generan en España. Entre otras medidas, ha establecido un “impuesto verde” al plástico, en vigor desde el pasado 1 de enero.
Según este, todo envase primario, secundario o terciario no reutilizable que contenga plástico estará sujeto a un cargo de 0,45€/Kg. Una cantidad que podrá reducirse en caso de que una parte del producto proceda de material reciclado.
Ecodiseño
Las empresas españolas trabajamos desde hace años para incorporar la sostenibilidad en nuestros procesos productivos con el objetivo de reducir su huella ambiental.
De hecho, a lo largo del pasado año más de 2.000 empresas españolas pusieron en práctica 4.632 medidas de diseño sostenible para reducir el impacto ambiental de sus envases.
Conseguir los objetivos comunitarios de reducción, reutilización y reciclabilidad pasa por conocer los principios del ecopackaging y saber aplicarlos para el diseño y desarrollo de envases y embalajes sostenibles.
La tendencia seguirá siendo optar por embalajes que con la mínima cantidad de material posible garanticen la protección del producto a lo largo de su cadena de distribución, reduciendo el impacto ambiental, así como el coste económico asociado al transporte, y a su vez, cumplan con las expectativas del consumidor.
Crecimiento del comercio online
El comercio online continuará creciendo, lo que repercutirá en el packaging y la logística. La demanda de soluciones de embalaje como las cajas de cartón ondulado y productos de protección y acolchado de mercancía irá en aumento, aparecerán nuevos envases especiales y opciones de envío personalizados.
Smart packaging
El uso de tecnología aplicada al campo del envase y del embalaje está impulsando una nueva generación de packaging. Hablamos del smart packaging, de creciente aplicación en la industria alimentaria, farmacéutica o cosmética.
Envases que cambiarán de color si el producto está próximo a caducar, o que emitan partículas para su conservación, verán la luz a lo largo del año.
Cada vez es más común integrar etiquetas inteligentes, RFID, códigos QR y chips NFC en los envases. Estos dispositivos proporcionan más y mejor información sobre la calidad del producto, sus condiciones de almacenamiento o trazabilidad.
También la automatización con robots “Pick and Place” se irá extendiendo a más industrias con el objetivo de aportar una mayor eficacia y flexibilidad a los procesos de embalaje.
¿Qué te parecen estos cambios? ¿Añadirías alguno más a la lista? ️