La demanda de paneles solares está experimentado un fuerte crecimiento en el mercado europeo como consecuencia del alza en los precios de la electricidad y el gas. En España, la energía solar creció un 37% en 2021 con respecto al año anterior. Y todo apunta a que esta tendencia se consolidará gracias a los planes de ayuda al autoconsumo, la agilidad en las licencias de instalación y una mayor conciencia ecológica.
Las empresas fabricantes de envases y embalajes no somos ajenas a esta transformación energética. Hace años que la ingeniería del embalaje proporciona soluciones para grandes y pesados equipos, maquinarias y mercancías que requieren un tratamiento especial para su almacenamiento y transporte, como es el embalaje para cristal, vidrio y placas solares.
Factores a tener en cuenta en el transporte y embalaje de paneles solares
No todas las mercancías son iguales ni necesitan la misma protección. Es importante saber qué tipo de embalaje utilizar según nuestra mercancía para protegerla ante agentes externos como el calor, la humedad, la corrosión o impactos que pueda sufrir durante el trayecto y llegue a su destino como recién salida de fábrica.
Las placas solares se componen de células fotovoltaicas que se forman mediante obleas de silicio. Por su naturaleza requieren de un embalaje adecuado a su peso, que permita el apilamiento e incorpore elementos de protección que absorban posibles vibraciones o impactos que puedan comprometer su integridad.
Hasta hace poco en el sector de la energía solar era habitual recurrir a racks metálicos para el transporte marítimo de paneles solares en contenedor. Sin embargo, el metal es vulnerable a la corrosión. Y este tipo de estructuras metálicas suelen dañarse con el uso repetido de la uña de la carretilla, por lo que su vida útil es más corta.
Por ello, se han ido sustituyendo por soluciones logísticas más ventajosas en términos de seguridad como de rentabilidad económica.
Ventajas del uso de madera para la protección de placas solares y vidrio
La madera es un material duradero, que permite una mayor personalización y capacidad de reutilización del embalaje.
Los embalajes especializados para la industria solar destacan por su optimización máxima de capacidad, siendo entre un 5 y un 7 por ciento superior a otros embalajes utilizados en este sector. Al maximizar el número de piezas por contenedor, se consigue un ahorro directo en costes de transporte.
Al igual que en el embalaje para cristales, el embalaje de madera para placas solares cumple la certificación NIMF15-ISPM15 para el transporte internacional, y está provisto de protección de las esquinas para evitar posibles roturas de las piezas durante los desplazamientos.
Otro de sus beneficios es la facilidad de manipulación. Al no emplear clavos, permite realizar el montaje sin necesidad de herramientas, haciendo esta tarea más rápida y segura. Y al ser desmontables todos sus componentes, el espacio que ocupa tras su uso es mínimo.
Hoy en día existen soluciones de embalaje personalizadas que se adaptan a las particularidades de cada mercancía. En este post, describimos el embalaje para paneles solares, pero cada sector requiere de sus propias especificaciones.
Consúltanos para una correcta elección.