Nadie es consciente de lo que tiene hasta que le toca hacer una mudanza, por eso en este post hablaremos de los embalajes para mudanzas. Mover nuestras pertenencias de un lugar a otro requiere de una buena planificación, comenzando por elegir el embalaje óptimo para que el traslado se resuelva rápido y sin contratiempos.
Como cualquier otro tipo de envío, cada mudanza exigirá un embalaje distinto, según el contenido que vayamos a transportar y el modo de transporte.
¿Cuál es el embalaje más adecuado para hacer una mudanza?
Los sistemas de embalaje para el sector de mudanzas o guardamuebles comparten las siguientes características:
- Son embalajes ligeros y resistentes.
- Son plegables, desmontables, que soportan muy bien la manipulación y casi todo tipo de movimiento.
- Son ergonómicos y permiten el montaje/desmontaje de una manera muy sencilla, casi sin emplear herramientas.
- La mayoría son, además, reutilizables, lo que supone un ahorrando en costes y respeto el medioambiente.
- Cuentan con sistemas auxiliares de embalaje para asegurar la integridad de la carga.
Tipos de embalajes para mudanzas
No hay dos mudanzas iguales. No es lo mismo la mudanza de una vivienda que el traslado de una oficina donde se movilizan equipos y componentes electrónicos, y mucho menos una mudanza transoceánica en contenedor.
Dependiendo del volumen de material a transportar, se pueden emplear soluciones de embalaje en madera, cartón o cartón combinado con madera. Los más habituales son:
Cajas de cartón
Las cajas de cartón son el embalaje estrella de las mudanzas. Como es lógico, se emplean cajas de diversos tamaños, según las necesidades. A partir de 8 kilos de peso, es recomendable utilizar cajas de cartón de dos canales que ofrecen mayor resistencia y protección.
Las cajas de cartón de gran volumen disponibles con solapas o con tapa, se emplean para movilizar mobiliario y enseres de grandes dimensiones.
Cajas de madera plegables
Las cajas de transporte de contrachapado con tapa son las más utilizadas para mudanzas transoceánicas. Este tipo de caja está fabricada con madera certificada NIMF15/ISPM15, por lo que es apta para envíos internacionales.
Es un tipo de caja reutilizable, apilable y abatible. Se compone de tapa, base con soporte y un cuerpo central muy consistente. El anclaje de las piezas es mediante lengüetas metálicas, lo que le proporciona una gran resistencia.
Rellenos para proteger el interior de las cajas
Tan importante como elegir la caja más adecuada para una mudanza es contar con auxiliares para protección y acolchado que aseguren el contenido en su interior.
Los productos de relleno para embalaje inmovilizan los objetos para evitar que sufran algún impacto durante su desplazamiento y los protegen de humedades o vibraciones para que lleguen en perfectas condiciones a su destino.
Una solución económica para proteger piezas de cerámica, cristalería o productos frágiles, además de para rellenar los huecos libres que quedan en las cajas, es la malla de cartón.
Las esquineras de cartón y los perfiles de espuma son imprescindibles para proteger los cantos en el interior y exterior de las cajas.
En mudanzas internacionales, y en especial en el transporte marítimo, las bolsas hinchables o airbags sirven como sistema complementario en el trincaje de carga para rellenar los huecos en contenedores e impedir que ésta se mueva.
En Encaja Embalajes no podemos trasladarte tus cosas, pero sí orientarte sobre el material de embalaje necesario para hacer una mudanza con la mayor seguridad.